El Catecismo de Heidelberg es un documento antiguo que ha sido aceptado por la Iglesia reformada como una de las Tres Formas de Unidad, y expresa las doctrinas reformadas de manera concisa. El contenido principal es el único consuelo tanto en la vida como en la muerte, y enseña cómo un pecador puede conseguir este consuelo. El contenido del Catecismo es esencialmente intemporal; las verdades expuestas en él son nuevas y frescas cada vez que las estudiamos.