El tiempo ha llegado que los maestros de escuelas cristianas confronten el espíritu de secularismo, tan desenfrenado en la cultura occidental, con un mensaje basado en el evangelio y centrado en Cristo. Están en juego los corazones y mentes de todos los alumnos que, en nuestras escuelas, Dios ha puesto bajo nuestro cuidado. ¿Estarán los maestros listos para ofrecer a los alumnos otra manera de verse a sí mismos como agentes de Cristo en lugar de agentes del secularismo? ¿Serán nuestras escuelas lugares que llamen a los alumnos a "llenarse" de información en todo su aprendizaje? Este pequeño libro está dedicado a equipar a los maestros a tomar su llamado no solo de ser cristianos, sino también de enseñar como cristianos ante sus alumnos.