Animándonos unos a otros es uno de los temas más dominantes del Nuevo Testamento, tanto en el proceso de fundar iglesias, como en el de edificarlas para llevarlas a la madurez. Este concepto es usado más de 100 veces en el libro de los Hechos y en las Epístolas.
Bernabé, cuyo nombre significa "Hijo de consolación" es el modelo más relevante de este estudio. Su forma de animar o consolar ilustra el proceso de servicio mutuo que deben prestarse los miembros del cuerpo de Cristo.
Su iglesia puede cambiar para convertirse en un organismo dinámico y funcional, donde cada creyente edifica a los otros por medio de la exhortación mutua. Este libro le ayudará a entender este elemento vital de la vida cristiana.