Esta extraordinaria y conocida obra de John Piper utilizada masivamente como libro de texto de misiones en Seminarios e Institutos Bíblicos, y de la que se han vendido ya hasta la fecha cerda de 200.000 ejemplares, se basa en textos bíblicos claves para demostrar que el fin último y primordial de la iglesia es la adoración y una adoración apropiada impulsa la acción misionera.
Piper hace una defensa bíblica de la supremacía de Dios en todas las cosas, y proporciona a los lectores una base teológica sólida para las misiones. Examina y debate si Jesús es el único camino a de salvación y plantea una súplica apasionada a una labor misionera cristocéntrica, buscando definir y presentir con claridad tanto el alcance de la tarea como los medios para llevarla a cabo y llegar a “todas las naciones.”
Un libro clave es cuya lectura resulta indispensable a todos aquello que de algún modo participan o se preparan para trabajar en la obra misionera, ya sea directa o indirectamente. Y además ofrece una visión fresca del tema de las misiones tanto a los jóvenes que sienten el llamado a dedicarse, como a los que se ven en la necesidad de aconsejarles: pastores, posesores, consejeros, y líderes juveniles.
Desde su publicación en 1993, revisado y ampliado en dos ocasiones, este libro se ha convertido en uno de los mejores referentes teológicos en cuanto al tema de las misiones, tanto para pastores, misioneros y estudiantes de seminario, como para todos los creyentes en general que sienten interés por el tema misionero.
Piper admite abiertamente que a diferencia de otros libros, su propósito no es promocionar un método o aplicación metodológica de la labor misionera, sino aportar la necesaria reflexión bíblica y teológica sobre el tema, lo más importante, pues si ésta falla, toda propuesta metodológica fracasa y se desmorona sin remedio. Apoyándose en textos del Antiguo y del Nuevo Testamento, Piper pasa revista por entero al terna de las misiones y a su relación con la misión de la Iglesia y de los creyentes en el mundo.
No soslaya los temas difíciles, como el de la realidad del infierno y la necesidad de la fe consciente en Cristo para evitarlo, antes bien los aborda y debate con maestría, basando siempre sus respuestas en textos bíblicos. Tampoco deja de lado el tema del sufrimiento que muchas veces se experimenta en el mundo de las misiones, demostrando que se trata de un sufrimiento que merece la pena. Ni evita el necesario debate sobre si Jesús es el único camino a la salvación. Aparte de apoyar sus ideas en textos bíblicos, cita abundantemente a otros autores, en especial a los puritanos, con lo que el libro adquiere un enfoque global que va mucho más allá en sus concepciones que las propias del entorno bautista-calvinista del autor.
Sin lugar a dudas uno de mejores libros bíblicos-teológicos sobre el tema misiones que jamás se haya escrito y disponible en el mercado. No cubre de manera exhaustiva toda la enseñanza de la Biblia sobre las misiones, pero resume y aclara los temas principales y aporta respuestas a los problemas más apremiantes.
